La cocina es uno de los lugares más habituales de
la casa donde puede tener lugar un incendio, bien porque un fuego se haya
quedado encendido o porque haya prendido un trapo, por ejemplo. Por eso, es
imprescindible contar no sólo en este lugar con los correspondientes extintores
sino también haber acometido previamente un correcto mantenimiento de extintores para que estos puedan realizar sus funciones de la manera más
óptima.
De la misma manera, en el caso de un incendio en
dicha estancia de la vivienda se hace necesario seguir una serie de consejos
que pueden ser de gran utilidad a la hora de evitar que cause graves
daños materiales y personales:
- Si el fuego se ha producido dentro de lo que sería el horno, lo que hay que hacer es apagar este y mantener la puerta cerrada del mismo. Si se puede, se debe quitar su enchufe de la corriente.
- En el caso de que lo que esté ardiendo sea una sartén hay que proceder a colocar una tapa sobre la misma, algo que se deberá hacer de forma suave y con cuidado de no quemarse. Por supuesto, hay que apagar la hornilla correspondiente.
- Cuando la persona que está en la cocina está viendo que su ropa está prendiendo, lo que debe hacer es tirarse al suelo y rodar para que así el fuego se extinga. Todo ello mientras se tapa la cara con las manos.
- Por supuesto, hay que asegurarse de que las personas que están en la casa salen de la misma.
- Tanto si se tiene dudas acerca de cómo apagar el fuego como si aquel no se puede apagar, rápidamente hay que salir de la cocina y de la casa dejando cerrada la puerta de dicha estancia. Acto seguido habrá que llamar rápidamente a los bomberos.